Expandiendo el conocimiento de nuestros melones
En Naranjas Launu, hemos decidido expandir el conocimiento sobre nuestros melones y sandías, llevándolos a todo el territorio peninsular. Aunque los melones de nuestra zona no gozan de la misma fama que los de Almería, Murcia, Villarconejos o Castilla-La Mancha, su calidad y sabor no tienen nada que envidiar a los de esas regiones.
Un cultivo de tradición y esmero
A diferencia de las grandes extensiones de cultivo de esas zonas, en La Llosa predominan los minifundios y los pequeños productores, quienes se encargan de mimar cada planta con esmero y dedicación. En Naranjas Launu, somos una familia arraigada en este hermoso pueblo de la provincia de Castellón, situado en el litoral sur. Llevamos más de 50 años cultivando melones y sandías, transmitiendo de generación en generación la pasión por el campo y el amor por nuestros productos.
Un proceso artesanal de cultivo
Nuestra forma de cultivo se mantiene fiel a la tradición, sin procesos mecanizados. Cada etapa es realizada de manera artesanal: desde el marcado de la tierra hasta la colocación del plástico y la plantación manual de cada melonera. La fertilización y protección de los melones también es realizada con nuestras manos, asegurando que el sol no los queme en los abrasadores meses de julio y agosto. Este seguimiento diario nos permite garantizar una maduración perfecta y una calidad excepcional.
Un entorno natural privilegiado
El entorno natural en el que se cultivan nuestros melones es un factor determinante en su sabor. La Llosa cuenta con una extensión de tierra de marjal, caracterizada por su suelo negro, húmedo y arenoso, ubicado a menos de 3 km del Mar Mediterráneo. Gracias a su alta capacidad de filtración, nuestros cultivos no requieren riego artificial, ya que reciben la humedad suficiente del subsuelo. Durante los meses de octubre a febrero, la tierra se inunda debido a la subida del nivel freático del mar, lo que permite que absorba los nutrientes y sales minerales necesarios para ofrecer una cosecha rica y equilibrada.
Un clima ideal para el melón
El clima de La Llosa también juega un papel clave en el desarrollo de los melones. Con muchas horas de sol y temperaturas cálidas, las meloneras crecen con rapidez y logran un proceso de maduración excepcional. La cercanía al mar ayuda a mantener una humedad constante en la tierra, asegurando el bienestar de las plantas y la excelente calidad de sus frutos.
Variedades y recolección del melón
El melón que cultivamos en Naranjas Launu es el melón piel de sapo, en sus diversas variedades. Su recolección se realiza bajo pedido, durante los meses de julio y agosto, con el fin de garantizar que cada pieza llegue al consumidor en su punto óptimo de maduración. Estos dos meses representan un periodo de intenso trabajo, pero el esfuerzo vale la pena al ver la satisfacción de nuestros clientes al disfrutar de un producto fresco, jugoso y dulce.
Beneficios del melón y la sandía
Tanto el melón como la sandía son frutas esenciales del verano, con un alto contenido de agua, lo que las convierte en opciones refrescantes e ideales para combatir el calor. Además, son ricas en vitaminas y minerales: el melón aporta betacarotenos, fósforo y vitamina C, mientras que la sandía es fuente de potasio y antioxidantes. Ambas frutas no solo deleitan el paladar, sino que también aportan importantes beneficios para la salud.
Compromiso con la calidad y la tradición
Desde Naranjas Launu, seguimos apostando por la calidad y la tradición, ofreciendo melones y sandías cultivados con esmero y dedicación. Nuestro compromiso es que cada pieza de fruta que llegue a tu mesa sea un reflejo del amor y la pasión con los que trabajamos nuestra tierra. ¡Prueba nuestros melones y descubre el auténtico sabor de La Llosa!